Michael y KITT, persiguiendo a un falsificador de billetes, llegan a Alpine Crest, un aburrido pueblo que parece estar atrapado en los años 50, y que tiene la tasa mas baja de crimines del estado. Allí conocerán a una joven reportera, deseosa de entrar a trabajar en un gran periódico y a un policía corrupto que utiliza cualquier medio para que el pueblo siga siendo «pequeño y decente».